En la tercera jornada de la cuadragésima sexta Reunión del Comité de Huracanes de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), se informó que se retiró a Otis de la lista rotativa de nombres de ciclones tropicales que se utilizan en la cuenca del Pacífico Norte oriental debido a la cantidad de víctimas mortales y la destrucción que causó al tocar tierra en la turística ciudad de Acapulco (México), en octubre de 2023.
Asimismo, el Comité ha suprimido Dora de esa lista; no por los daños directos que causó, sino por considerar que ese nombre podría herir sensibilidades debido a la influencia meteorológica indirecta que tuvo Dora en los devastadores incendios forestales de Maui (Hawái) en agosto de 2023.
El nombre de Dora ya fue retirado de la lista que se utiliza para designar los ciclones tropicales de la cuenca del Atlántico en 1964.
En su lugar, Otilia y Débora se añadirán a la lista de nombres, que la OMM supervisa y cuya finalidad es ayudar a comunicar los avisos de tormenta y alertar a la población de riesgos potencialmente mortales. Existen seis listas que se
emplean de forma rotativa, por lo que los diversos nombres que las conforman se reutilizan cada seis años, a menos que una tormenta sea tan mortífera que se decida retirar su nombre.
Por primera vez desde 2014, el Comité no ha retirado ningún nombre de las listas de la cuenca del Atlántico.
La convención utilizada para asignar nombres a las tormentas suscita gran interés entre la población. Sin embargo, cabe señalar que es solo una pequeña parte de la labor que el Comité de Huracanes desempeña para salvar vidas.
“El trabajo del Comité de Huracanes es fundamental para garantizar que todos los habitantes de la región comprendida entre la cuenca del Atlántico y la del Pacífico oriental estén preparados para la temporada de huracanes de 2024 y minimizar los efectos de estas peligrosas tormentas sobre la vida y los bienes”, señaló el Dr. Michael Brennan, Presidente del Comité de Huracanes y Director del Centro Meteorológico Regional Especializado de Miami.
Está previsto que la reunión del Comité de Huracanes, que se está celebrando en estos momentos en Panamá, se centre en las prioridades operativas, en particular la emisión de predicciones y avisos sobre peligros asociados a vientos,
precipitaciones, mareas de tormenta e inundaciones, así como el suministro de evaluaciones de su impacto. Este año la reunión del Comité incluye dos sesiones especiales, a saber: una mesa redonda sobre observaciones y servicios oceánicos,y una sesión dedicada a los últimos avances en la iniciativa Alertas Tempranas para Todos.
“El Comité de Huracanes encarna el espíritu de cooperación y prestación de servicios que tan importante resulta para la OMM en un momento en que nos enfrentamos al mayor desafío de nuestra era: la crisis climática”, declaró la
Secretaria General de la OMM, Celeste Saulo, en un discurso en video dirigido a los participantes en la reunión.
“Todos sabemos que 2023 fue el año más caluroso jamás registrado. Si bien es cierto que la formación de un episodio de El Niño en el océano Pacífico contribuyó a ello, también observamos niveles sin precedentes de calentamiento oceánico en el Atlántico Norte y el Atlántico tropical; una tendencia que persiste en 2024”, afirmó.
Las temperaturas del océano Atlántico, las más cálidas desde que empezaron los registros, propiciaron que en 2023 la actividad de la temporada de huracanes fuera superior a la media y contrarrestaron notablemente los efectos típicos de un
episodio de El Niño (que tiende a reducir el número de huracanes).
La temporada de 2023 fue muy activa A lo largo de 2023, se registraron 20 tormentas con nombre en la cuenca del
Atlántico y 17 en la cuenca del Pacífico oriental.
La tormenta más fuerte de la temporada fue el huracán Otis, que tocó tierra cerca de Acapulco (México) el 25 de octubre como huracán de categoría 5 en la escala de vientos huracanados de Saffir-Simpson, con vientos sostenidos de 260 km por hora (160 mph).
Tras intensificarse rápidamente y que la velocidad de sus vientos aumentara 115 mph en 24 horas, Otis se convirtió en el huracán más fuerte jamás registrado en tocar tierra en el Pacífico oriental.
51 personas fallecieron a causa del huracán Otis en Acapulco y otras 34 desaparecieron. Según informaron las autoridades de México, Otis causó pérdidas económicas por valor de unos 3,200 millones de dólares de los Estados Unidos (53 198 millones de pesos mexicanos).
Dora fue un huracán de larga duración que alcanzó una intensidad de categoría 4 a su paso por ciertas partes de las cuencas del Pacífico oriental y central. Cruzó la línea internacional de cambio de fecha, convirtiéndose en tifón, antes de
debilitarse y alcanzar la parte occidental del Pacífico.
El huracán pasó por el sur del archipiélago de Hawái el 8 de agosto y alcanzó la línea internacional de cambio de fecha el 12 de agosto. Este hecho convierte a Dora en un ciclón tropical atípico, puesto que atravesó las tres cuencas de ciclones
tropicales del océano Pacífico, y es solo el segundo en hacerlo como huracán (el anterior fue el huracán John en 1994).
Aunque no se registraron daños ni víctimas mortales como consecuencia directa de este huracán, Dora estuvo indirectamente relacionado con los catastróficos incendios forestales de Maui (Hawái). Hubo indicios de que el paso de Dora hacia el sur potenció los vientos alisios de baja intensidad, avivando las mortíferas llamas que asolaron el archipiélago de Hawái.
Alertas Tempranas para todos
El Comité de Huracanes está integrado por expertos de los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales y representa a América del Norte, América Central y el Caribe (Asociación Regional IV de la OMM) y otros países
conexos, como Cabo Verde. España y Portugal participaron en la reunión en calidad de observadores.
Los resultados más importantes de la reunión del Comité se presentarán en la Cuarta Conferencia Internacional sobre los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo, que tendrá lugar en Antigua y Barbuda en mayo de 2024.
La temporada de huracanes en el Atlántico comienza oficialmente el 1 de junio y se prolonga hasta el 30 de noviembre, mientras que la del Pacífico Norte oriental se extiende del 15 de mayo al 30 de noviembre.
Cada año se forman, de media, 85 ciclones tropicales con nombre en todo el mundo.
En los últimos 50 años, han provocado una media diaria de 43 víctimas mortales y 78 millones de dólares en pérdidas, además de entrañar una tercera parte de las muertes y las pérdidas económicas causadas por desastres relacionados con el tiempo, el clima y el agua, según las estadísticas compiladas por la OMM correspondientes al período de 1970 a 2019.
Sin embargo, la cantidad de víctimas mortales ha disminuido drásticamente gracias a las mejoras en los pronósticos, los avisos y las medidas de reducción de riesgos de desastre fruto de la coordinación propiciada por el Programa de Ciclones Tropicales de la OMM.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha encomendado a la OMM la elaboración de un plan para velar por que, en los próximos cinco años, todo el mundo cuente con la protección que brindan los sistemas de alerta
temprana.
El trabajo del Comité de Huracanes de la OMM constituye un pilar central de la iniciativa Alertas Temprana para Todos.